En el difícil escenario económico actual, donde el dinero efectivo es rey, todos se ven impulsados a conservar efectivo. Por consiguiente, los compradores piden descuentos de sus proveedores y hacen la transición de gastos de capital a gastos operativos u optimización de licencias, o una combinación de estos. Cualquiera de estos mecanismos puede reducir los ingresos del proveedor de software independiente. El paso de gastos de capital a gastos operativos ha adquirido recientemente un interés especial, ya que es un tema que suele conducir a debates sobre modelos de precios de pago por uso o de suscripción. Los proveedores de software independientes suelen pensar en migrar a ofertas de SaaS cuando consideran ofrecer estos nuevos modelos de precios. Ofrecer SaaS conlleva una serie de desafíos, como la necesidad de disponer de una infraestructura de alojamiento, el cobro de pagos, esfuerzos de investigación y desarrollo para construir la nueva plataforma de software como servicio (SaaS) y su repercusión en los planes de acción de productos actuales. Sería ideal que los proveedores de software independientes pudieran ofrecer el nuevo modelo de precios sin tener que invertir en investigación y desarrollo de software como servicio (SaaS). La capacidad para hacerlo es lo que llamo «Virtual SaaS» (software como servicio virtual). El «Virtual SaaS» (software como servicio virtual) es una búsqueda del santo grial de opciones para proveedores de software independientes cuyos ingresos actuales provienen casi en su totalidad de la venta de licencias perpetuas, pero a quienes se les plantean preguntas acerca de su historial software como servicio (SaaS). Examinemos la situación de un proveedor de software independiente. Debe dividir su presupuesto actual de investigación y desarrollo para financiar el desarrollo del software como servicio (SaaS) y recibir un impacto en el plan de acción del producto —sea en términos del alcance o del cronograma de características, o ambos— o bien debe aumentar su presupuesto de investigación y desarrollo para financiar el desarrollo del desarrollo del software como servicio (SaaS). Ambas opciones no suelen ser asequibles pra el proveedor de software independiente, lo que despierta su recelo acerca de toda estrategia viable en torno a los modelos de precios de pago por uso y de suscripción. Sin embargo, hoy día existe la tecnología mediante la cual el proveedor de software independiente puede proveer los mismos paquetes de software que se puede vender en los modelos de precios perpetuos,  en modelos de pago por uso o en modelos de precios de suscripción y así facilitar el «Virtual SaaS» (software como servicio virtual).   Esto brinda al cliente una experiencia modelo de precios de software como servicio, sin prescindir del mantenimiento del software en el entorno local. La desventaja de este modelo es relativamente clara, ya que el cliente final aún debe instalar y gestionar el producto de su lado. Sin embargo, presenta muchas ventajas:

  • El proveedor de software independiente puede examinar la demanda de modelos de precios de pago por uso y de suscripción en el mercado sin adelantarse a sus propios procesos
  • El cliente final que no está listo para una transición completa a la nube puede mantener todos los datos en el nivel local o interno
  • El cliente final puede ejecutar localmente la aplicación

En función de lo que su mercado demande, quizá le convenga más dar un paso intermedio hacia el «Virtual SaaS» (software como servicio virtual) en lugar de pasar directamente al SaaS.